Ortodoncia

Ortodoncia con brackets: Es la más común tanto en jóvenes como en adultos. Estos aparatos se adhieren a los dientes en su cara externa y se conectan entre ellos mediante un alambre. El ortodoncista aplicará fuerza de manera progresiva durante meses para conseguir la correcta posición dental. El paciente no se los puede retirar.  Existen brackets de diferentes materiales: metálicos, cerámicos, zafiro… Hay una alternativa más estética denominada ortodoncia lingual, donde los brackets se adhieren en la cara interna de los dientes.

Ortodoncia invisible (Invisalign). La función es la misma que los brackets convencionales. En este caso, se usan férulas transparentes que se van cambiando cada una o dos semanas. El paciente se las puede retirar para comer  y cepillarse los dientes. Se recomienda llevar la férula durante 22 horas al día. 

Ortodoncia interceptiva y miofuncional. Es terapia preventiva dirigida a niños de 3 a 14 años. Se utilizan cuando el paciente presenta dientes temporales ( o de leche) y su función es corregir hábitos anormales que pueden afectar en el patrón normal de crecimiento facial y de los maxilares. En ocasiones si la maloclusión es avanzada se requiere tratamiento con brackets o invisible cuando el paciente presenta toda la dentición de adulto.